Frontera y nación I

reflexiona acerca del uso actual de los conceptos de frontera e identidad nacional; valora su pertinencia en el contexto de un mundo globalizado.

Valoración de la comunidad:

Última Actualización:

4 de Septiembre de 2024 a las 18:41

 

Frontera y nación I

Aprendizaje esperado: reflexiona acerca del uso actual de los conceptos de frontera e identidad nacional; valora su pertinencia en el contexto de un mundo globalizado.

Énfasis: reflexionar sobre la actualidad de los conceptos de frontera e identidad nacional.

¿Qué vamos a aprender?

En la sesión de hoy reflexionarás sobre la actualidad de los conceptos de frontera e identidad nacional. Para hacerlo estudiarás el conflicto territorial existente entre Palestina e Israel.

Ten a la mano tu lápiz o bolígrafo, cuaderno, hojas blancas, y tu libro de texto para profundizar y ampliar tus conocimientos acerca del tema.

¿Qué hacemos?

Para iniciar, es necesario discutir en qué consiste la idea de nación, pues de ella se desprenden los conceptos de frontera e identidad nacional. Para ello, en la sección “Leer para conocer”, se te compartirá un fragmento del libro de Benedict Anderson titulado Comunidades imaginadas. Dice así:

“Con un espíritu antropológico propongo la definición siguiente de la nación: una comunidad política imaginada como inherentemente limitada y soberana. Es imaginada porque aún los miembros de la nación más pequeña no conocerán jamás a la mayoría de sus compatriotas, no los verán ni oirán siquiera hablar de ellos, pero en la mente de cada uno vive la imagen de su comunión […]

La nación se imagina limitada porque incluso la mayor de ellas, que alberga tal vez millones de seres humanos vivos, tiene fronteras finitas, aunque elásticas, más allá de las cuales se encuentran otras naciones. Ninguna nación se imagina con las dimensiones de la humanidad.

Los nacionalistas más mesiánicos no sueñan con que habrá un día en que todos los miembros de la humanidad se unirán a su nación, como en ciertas épocas pudieron pensar los cristianos, por ejemplo, en un planeta enteramente cristiano.

[…] Se imagina como comunidad porque, independientemente de la desigualdad y la explotación que en efecto puedan prevalecer en cada caso, la nación se concibe siempre como un compañerismo profundo, horizontal. En última instancia, es esta fraternidad la que ha permitido, durante los últimos dos siglos, que tantos millones de personas maten y, sobre todo, estén dispuestos por imaginaciones tan limitadas”.

Estas naciones, como comunidades imaginadas, no surgieron de la nada, tuvieron un antecedente en las antiguas comunidades religiosas. La lectura continúa:

“Pocas cosas son más impresionantes que el vasto territorio del islam que se extiende desde Marruecos hasta el archipiélago Sulú, el de la cristiandad que va desde Paraguay hasta Japón, y el del mundo budista desde Siri Lanka hasta la península coreana.

Las grandes culturas sagradas incorporaron concepciones de comunidades inmensas. Pero el cristianismo, el islam Umah y aun el Reino Medio, eran imaginables en gran medida por medio de la lengua sagrada y una escritura. […] Todas las grandes comunidades clásicas se concebían a sí mismas como cósmicamente centrales, por medio de una lengua sagrada ligada a un orden de poder ultraterrenal. En consecuencia, el alcance del latín, el pali, el árabe o el chino escritos era, en teoría, ilimitado”.

Hasta aquí la lectura.

Como revisaste en la lectura, se abordaron diferentes aspectos muy relevantes que debes considerar.

Por un lado, que las naciones no han existido siempre, pues si recuerdas las primeras sesiones de este ciclo escolar, fue a partir de los siglos XV y XVI que las naciones cobraron forma en Europa.

Antes de las naciones, existían grandes comunidades en las que las personas se encontraban unidas a partir de ciertos rasgos particulares; el que resalta Anderson es el de la religión.

De esta manera, el cristianismo, el islam y otras religiones han desarrollado la idea de que es posible crear una comunidad universal a partir de una visión compartida sobre el mundo, además del uso de una sola lengua y ciertas tradiciones.

Así, para el cristianismo el latín fungió durante la Edad Media como la lengua unificadora, mientras que para el islam lo fue el árabe. Incluso hoy en día, algunas de sus oraciones solo pueden ser comprendidas y recitadas en árabe.

A partir del siglo XV, estas comunidades basadas en la religión comenzaron a cambiar. Las naciones, de acuerdo con la interpretación de Benedict Anderson, surgieron como comunidades imaginadas en las que se crearon, inventaron o afianzaron ideas, historias, idiomas, tradiciones y comportamientos en comunidades en particular.

Por ejemplo, España fue unificada bajo la idea de que los miembros de su comunidad eran y debían ser católicos, lo que llevaría, entre otras cosas, a la expulsión de los judíos y musulmanes; a su vez, se impuso con el tiempo el castellano como idioma y ya en el siglo XVI con la expansión del Imperio Español en el mundo, se buscó replicar aquella comunidad en el continente americano.

De esta manera, se desarrollaron las naciones durante varios años hasta que, en los siglos XIX y XX, los ultranacionalismos, junto a otras causas, llevaron al estallido de diversos conflictos, como la Primera Guerra Mundial y siendo el más cruento, la Segunda Guerra Mundial.

A lo largo de la Guerra Fría, muchas naciones del mundo lucharon por conseguir su independencia, construyendo de esa manera diversas fronteras e identidades nacionales. Tras el fin de ésta y la expansión de la globalización, la idea de las naciones como comunidades estáticas, que no cambian, que son cerradas, fue reduciéndose a favor de la idea de un mundo mucho más unificado.

Sin embargo, esto no evitó que estallarán conflictos cuyas causas se encontraron en momentos previos. Todo esto ha motivado a repensar el nacionalismo dentro de la globalización.

Por ejemplo, ¿es posible defender la idea de una nación como una comunidad única ante un mundo globalizado cuyas fronteras son cada vez más nítidas? ¿Acaso una persona se define más por su nacionalidad que por su carácter como persona del mundo?

Como se mencionó al inicio de la sesión, para reflexionar sobre la actualidad de los conceptos de frontera e identidad nacional, se tomará el caso del conflicto territorial que se suscita actualmente en Palestina. Pero antes, debes tener algunas nociones básicas del islam que te ayudarán a explicar este conflicto. Revisa el siguiente video.

  1. El islam: pasado y presente.

Revisa del tiempo 00:19 a 02:54.

Como notaste en el video, el islam es una religión que se expandió por los territorios que forman parte de lo que se llama “Medio Oriente”.

Al igual que el cristianismo y el judaísmo, el islam es una de las grandes religiones del mundo que se caracteriza por haber surgido en Medio Oriente, entre otras cosas, por tener un libro sagrado, como el Corán; así como un profeta: Mahoma.

Luego de la caída y resquebrajamiento del Imperio Turco otomano, las potencias occidentales se repartieron Medio Oriente. Inglaterra pasó a administrar lo que se conoció como el territorio de Palestina, mientras que Francia hizo lo mismo con Siria.

Las divisiones que hicieron las potencias en estos territorios no tomaron en cuenta, los intereses, necesidades o problemas de las poblaciones locales.

Por un lado, grupos nacionalistas árabes esperaban la formación de una Gran Arabia, es decir, una nación en la que pudieran habitar los numerosos pueblos árabes que se encontraban en Medio Oriente y parte del norte de África.

Por otra parte, desde la década de los 20 y aún más, después del Holocausto de la Segunda Guerra Mundial, comenzó a migrar una enorme población judía hacia los territorios palestinos con el objetivo de crear su propia nación en las tierras que, de acuerdo con su religión, les pertenecían desde los antiguos tiempos de Israel.

La presencia de estos dos grupos nacionalistas, árabes y judíos se profundizó tras el fin de la Segunda Guerra Mundial cuando en 1948 se creó el Estado de Israel, dividiendo Palestina en dos: una parte para los palestinos y otra para los israelíes.

La reacción ante la creación de la nueva nación no se hizo esperar. Ese mismo año, tropas de Egipto, Siria, Transjordania, Irak y Líbano invadieron Israel; pero éste último, con apoyo de algunas potencias occidentales, salió victorioso y, de hecho, ocupó más territorios de los que les habían reconocido inicialmente.

Como has revisado en la asignatura de Geografía, este tipo de conflictos territoriales trae consigo consecuencias políticas y sociales que no logran solucionarse a corto plazo.

El mundo atestiguó el surgimiento de un nuevo Estado nación cuyo centro de unificación e identidad nacional se dio en torno a demandas religiosas e históricas, muy diferentes a las naciones europeas.

¿Qué elementos te imaginas que conforman las ideas de nación de personas que han sido expulsadas de sus hogares?

Durante el resto del siglo XX, se suscitaron otros enfrentamientos entre el Estado de Israel y sus vecinos por controles territoriales y recursos naturales. Dentro de las disputas que se originaron en la región, está la cuestión de la ciudad de Jerusalén.

Esta ciudad es importante para 3 de las religiones más grandes del mundo, pues, de acuerdo con cada una de sus creencias, ahí fue crucificado Jesús de Nazaret para los cristianos; para los musulmanes, Mahoma tuvo un momento de ascensión al cielo; y para los judíos porque, en ella se encuentran los restos del templo de Salomón, uno de sus gobernantes bíblicos.

Como recordarás, desde la Edad Media, Jerusalén fue motivo de conflicto debido a que los cristianos europeos buscaban conquistar la ciudad de manos de los musulmanes. Aunque lo lograron en un primer momento, los seguidores del islam recuperaron la ciudad para ellos hasta 1949 cuando, tras la guerra de Israel y sus vecinos, Israel la proclamó como su ciudad capital.

En el desarrollo de este conflicto el Estado Palestino se ha visto reducido territorialmente de una manera muy significativa a mucho menos de la mitad del territorio que tenía a mediados del siglo XX.

A los diferentes levantamientos armados de la población palestina se les conoce como Intifada, los cuales, tienen diferentes objetivos, ya sea la liberación de los territorios palestinos, o bien, la destrucción del Estado de Israel. A pesar de que se contabilizan tres Intifada, hay continuos levantamientos armados y protestas por parte de palestinos y musulmanes en toda la región.

Todos estos conflictos han transformado tanto a Palestina como a Israel, al igual que los sentimientos nacionalistas de sus habitantes. De acuerdo con Martín Martinelli:

“Durante más de medio siglo desde 1948, se han desarrollado tres movimientos palestinos principales, cada uno con su ideología: el Movimiento de Nacionalistas Árabes (MNA), Fatah y Hamas.

En primer término, el Movimiento de Nacionalistas Árabes represento la fase nacionalista árabe y el panarabismo que domino la política árabe en la década de 1950 y comienzos de 1960. En segundo término, el Fatah —en arabe «apertura» y acrónimo inverso de Movimiento Nacional de Liberación de Palestina— es una expresión de un nacionalismo palestino laico más específico. Por último, el Hamas —en árabe «entusiasmo» y acrónimo inverso de Movimiento de Resistencia Islámico— representa la variante religiosa del nacionalismo palestino y refleja la corriente islámica desde mediados de la década de 1980. Cada uno de ellos detento un periodo de mayor influencia. De forma aproximada, Fatah desde 1967 hasta finales de 1980 y Hamas desde la década de 1990 hasta la actualidad”.

El nacionalismo que funge como sentimiento de identidad entre los palestinos ha sufrido diferentes cambios: ha ido de buscar la unión entre árabes; a la formación de un Estado palestino laico, hasta lo que predomina hoy con un carácter mucho más religioso. Esto le otorga una variedad muy amplia a la identidad nacional de los palestinos, pues las 3 visiones coexisten.

Pero esta tendencia a que existan diversas formas de identidad nacional ligadas a la religión es algo regional. Dentro de estos casos se tiene el gobierno de Irán, donde la política es definida en buena medida por la interpretación que hacen los gobernantes del Corán.

Estos nuevos nacionalismos de corte religioso explotan valores que van más allá de la identificación con un territorio en común. Al sentirse identificados con una religión, están considerándose dentro de una comunidad universal, la cual, en teoría, no debe tener fronteras. Es decir, se trata de una forma de nacionalismo tanto político al identificarse como parte de una comunidad que interactúa con otras, como un nacionalismo más espiritual guiado por las creencias religiosas en una sociedad universal.

Ahora, después de leer lo anterior, imagina que existen, por ejemplo, palestinos que viven como refugiados en otros territorios, muchas veces tienen otro nacionalismo que los vincula, sí como palestinos y musulmanes, pero también como provenientes de uno u otro territorio.

Llegados a este punto, las fronteras que en el siglo XXI se supone que deberían servir para comunicar a las personas, en algunos casos todavía presentan la posibilidad de estimular el desarrollo de diferentes formas de nacionalismo o de identidad nacional.

En este caso incluso se podría retomar a Siria, un país que ha estado en guerra durante varios años.

Para complementar lo mencionado, revisa el siguiente video.

  1. Geografía. ¿Qué es un conflicto territorial y por qué ocurre?

Revisa del tiempo 02:31 al 03:13, del 03:31 al 04:13 y del 04:36 al 05:44.

Como se presentó en el video, y a través de esta sesión, las diferencias religiosas, incluso al interior de una nación, pueden ocasionar diferentes conflictos porque cada una de ellas trae consigo una forma de identidad nacional particular.

En el proceso de la globalización, la existencia de los nacionalismos religiosos te invita a reflexionar hasta qué punto se está muy cerca de crear un mundo en donde las fronteras no signifiquen un peligro o un objeto de disputa.

No olvides que puedes consultar tus libros de texto de Historia y Geografía.

El reto de hoy:

Para el reto de esta sesión, debes considerar que tú formas parte de una nación, la nación mexicana. En ese sentido, reflexiona y responde en tu cuaderno, las siguientes preguntas:

  • ¿Te identificas con México como nación? ¿Por qué?
  • ¿Qué factores, sentimientos, ideas, personas, te vinculan con este país?
  • ¿Qué características podría tener tu identidad nacional al vivir en otro país?

¡Buen trabajo!

Gracias por tu esfuerzo.

Descarga la ficha dando clic aquí

Listado de recursos